10 octubre 2007

Las Claves de los Triunfadores

De acuerdo con los sicólogos, la suerte es equivalente sólo al uno por ciento del éxito que una persona pueda tener. El otro 99 por ciento se debe a su esfuerzo individual.

El ingrediente clave es la opinión que usted tenga de sí mismo o de su nivel de autoestima. Un elemento común a todas las personas afortunadas, es la confianza que tienen en sus habilidades. Son personas que están comprometidas con sus metas y ven un reto en donde los demás descubren amenazas.

Una frase de gran ayuda que viene en mente al triunfador cuando se le presenta una dificultad es "yo lo puedo hacer". Y, aunque muchas veces no está capacitado para realizar ciertas cosas, se esfuerza en aprender y es así que lo logra.


Otro recurso de los triunfadores es aplicar en todo momento el pensamiento positivo. Si se siente físicamente agotado o deprimido, elimine de su mente los recuerdos negativos y los momentos de angustia y de tensión, sustituyéndolos por ideas nuevas y optimistas para darle nuevo color a su vida.




Ideas Concretas de cómo transformar su mente y convertirse en un triunfador




1. Si quiere recibir, aprenda a dar. Por ejemplo, si desea cambiar su lavadora por una nueva, regale la vieja a alguien que la necesite, o dónesela a una institución de caridad. Esto genera un espacio, (mental y físico) para la nueva. Asimismo, si usted tiene alguna habilidad, úsela para ayudar a alguien, porque ese alguien lo compensará de alguna manera. Si, por ejemplo, usted sabe de mecánica y ayuda a un vecino a reparar su auto, éste posiblemente conozca a otras personas que podrían beneficiarse con sus servicios ¡pagándoselos!


2. Limite sus aspiraciones. En la vida, se sabe, no se puede tener todo, así que concéntrese en aquello que verdaderamente desea con todo su corazón. De esta forma dispondrá de más tiempo y energías para dedicarlos a los objetivos que realmente le interesan.


3. Haga algo cada día para lograr sus metas. Un grano aquí y otro allá forman la gran montaña. No se quede de brazos cruzados esperando el toque de la varita mágica. Si quiere aprender un idioma, si desea mejorar en su profesión, si sueña con un viaje a Europa. No espere la lotería, haga un plan y comiéncelo ya. Inscríbase en un instituto de idiomas, estudie, ahorre. Es usted quien decide si alcanzar o no sus propias metas.
4. Diga siempre "quiero" y no "necesito". Si considera que le hace falta un auto nuevo, cuando lo obtenga, se sentirá tranquilo porque cubrió una necesidad básica, pero no estará feliz por haberse dado un lujo o complacido un deseo.


5. Sea agradecido. Si tiene amor y salud, puede ya considerarse muy afortunado. Según un poeta inglés: "la suerte es la piedra en bruto que recibe al venir al mundo". En sus manos está el moldearla y pulirla para que le sea útil. Nunca emplee el concepto de mala suerte o destino para evadir las responsabilidades que se le presenten, porque esta es, además, una injusta forma de menospreciar los logros de los demás.